Outfit | Christmas vibes
9:00
Que se pare el tiempo. A veces no puedo dejar de repetir en mi cabeza esa frase, una y otra vez, en bucle, hasta el infinito. Sus pasos se están acelerando tan rápido que casi no me da tiempo a capturar toda la esencia de los momentos para notarlos eternos. A cambio puedo revivir desde otro punto de vista tantas cosas que tenía olvidadas que daría miedo anotarlas.
La Navidad, el tiempo en familia, los días especiales, todo cambia, todo vuelve a tener inocencia e ilusión y parece que escuecen menos los huecos que nos va dejando la vida a la hora de sentarnos en la mesa o en el sillón. Las luces que sorprenden, las canciones que resuenan, los juegos, las carreras, un montón de besos, los mimos y hasta preparar los regalos para ver esa mirada avispada posarse en cada milímetro y repetir la última sílaba de todo lo que dices.
Me apetecía mucho dejaros una entrada un poco más personal antes de terminar el año, sin reflexiones demasiado intensas de madre, pero con un trocito de corazón y él, asomando la patita, mi pequeño cachorrón. Porque, como dice Miliki, en una de las canciones que tanto le gustan a mi hijo: llega la Navidad con sabor a mazapán, de turrón, de mieles y demás. Vamos a celebrar la alegría en el hogar, nuestra Nochebuena una vez más [...].
El año pasado era demasiado pequeño. Miraba las luces sorprendido pero poco más. Este, corre, juega, grita, se emociona, pide "luz" al acercarse al árbol o nos señala una cinta decorativa. Te mira cuanto cantas y empieza a hacer lo propio. Es alegría pura, alegría, paz, desconexión y caos, porque no sabemos lo que es estar tranquilos nada más que si dormimos.
Pero a la vez, aun en los instantes en que no puedo más o me falta la paciencia y me siento la peor madre del mundo, se que es lo mejor que tengo en la vida. Algo diferente, una parte de mi que está mezclada, que es única, una mini personita que no deja de sorprendernos con su palabrerío y que me ha hecho ser capaz tirar para adelante con todo y con más (aunque con ayuda de la familia estupenda que tengo).
Navidad... hay personas que detestan la palabra, que tiemblan... Insistiría en mirarlo todo a través de los ojos de un niño y disfrutar. Porque como digo al principio de esta entrada: que se pare el tiempo. Cuando abramos los ojos de nuevo nos daremos cuenta de que ha volado y todo lo que no estemos dispuestos a disfrutar en el momento quizá se habrá perdido para siempre.
Abrigo: Quiz Clothing*
Camisa: Springfield
Pantalones: Primark
Calzado: Dockers
Bolso: Desigual
El cachorrón
Pantalones y cazadora: Mayoral
Se que no son las fotos más perfectas, que tengo una cara de cansada que no se puede aguantar, pero a la vez en realidad, es cansancio y felicidad a partes iguales. Es ser práctico. Extraño realizar propuestas mucho más elaboradas para vestir, pero necesito ir cómoda para correr, jugar y disfrutar. Esta vez he aprovechado para estrenar el abrigo largo de pelo en rosa palo que me han enviado desde Quiz Clothing, llegó bastante rápido, creo que fueron un par de semanas o tres, bien protegido y ¡es tan suave! Confieso que lo pedí con dudas, no sabía si el tacto me daría grima, pero no, es suavísimo y agradable de llevar. Muy calentito, aunque se sueltan algunos pelos como sucede con los abrigos de este estilo. Lo combiné con unos pantalones básicos en un tono que juega entre el rosa y el coral, ropiendo con una camisa azul de topitos, unos botines y un bolso negro.
* Este producto ha sido enviado por la marca/representante/web para probarlo, hago la reseña de forma libre y totalmente sincera esperando que os sirva.
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16 comentarios
Mira que está bonito tu niño! Me encanta veros, destiláis felicidad.
ResponderEliminarY sí, la navidad es muy especial con niños: nos contagian su ilusión y nos regalan felicidad.
¡Que paséis unas fiestas muy especiales!
Muaks!
Está enorme, crece tan rápido que el tiempo vuela más deprisa aun. Aunque me queda el consuelo de estar intentando disfrutar mil momentos con él.
Eliminar¡Un besote grande para ti y tu familia!
Preciosa con ese color rosita, dan ganas de achucharte jeje
ResponderEliminarEstoy de sorteo en el blog! Te espero! ;)
El cachorrón parece que tiene un año más de lo grande que está. Me gustan tus reflexiones Diana, la navidad es eso, tiempo de paz y alegría. Y con el peque a descubrir todo cada año, porque cada vez es más consciente de lo que le rodea. Disfruta mucho la magia navideña Diana
ResponderEliminarBesos
C
Estais guapísimo los dos!!!!
ResponderEliminarBesos
Me han encantado tus reflexiones. Y el abrigo me parece chulísimo.
ResponderEliminarBesos
¡Qué rápido va creciendo! No me extraña que quieras que se pare el tiempo... Yo echo de menos vivir la Navidad otra vez como si fuera pequeña, así que disfrútalo todo lo que puedas ;)
ResponderEliminar¡Besos!
tu vas guapísima pero el cachorro va monísimo!!! me encanta su outfit!
ResponderEliminarHola guapa. Me encanta como has combinado las prendas, un outfit cómodo y a la vez elegante. Me quedo con este abrigo tan, tan bonito y el bolso de Desigual!! Un beso y felices fiestas!
ResponderEliminarQue lindo look! Me encanta el abrigo rosa, es divino!
ResponderEliminarUn beso enorme, nos leemos pronto, felices fiestas ♥
Estás muy guapa, te sienta muy bien el rosa. Yo tengo ganas de comprar un abrigo así. Besitos!
ResponderEliminarMe gusta como te queda el abrigo. Yo no tengo nada aún de pelo, pero la verdad es que al verlo parece tan suave..Y bonitas palabras para terminar el año, me gusta cuando haces esas reflexiones. Espero que pases unas buenas navidades aunque con ese pequeñajo, seguro que cada día es especial. Besos
ResponderEliminarMuy bonito ese abrigo,y el peque que mayor!!!
ResponderEliminarBesos.
Cómo te entiendo, Di! Yo antes odiaba la navidad, pero desde que están por aquí las cachorrillas mi percepción de estas fiestas ha cambiado del todo. Beso! :)
ResponderEliminarMe ha encantado la entrada. La Navidad es una época tan bonita y con niños se hace aún más especial. Cansada o no estás guapísima siempre, bsts!
ResponderEliminarQue preciosa entrada. Entiendo y comparto cada una de tus palabras. Mi peque este año lo ha disfrutado mucho, y eso que tampoco se entera mucho de lo que pasa, es muy de ir a su bola. Pero estas navidades se ha espabilado a lo grande, se ha vuelto un lorito, y nos suelta unas sonrisas que nos desarman.
ResponderEliminarUn abrazo!
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