
De entrada el reto me parecía complicado puesto que estoy acostumbrada a utilizar más cantidad de productos, pero lo bueno es que muchas de las cosas que tenemos se pueden “reutilizar” para otros fines, así que os voy a ir explicando como usé cada uno de los protagonistas.
– Delineador master ink de Maybelline, el de acabado mate. Muchas veces si los ojos no van marcados creo que necesito un buen delineado si o si porque si no no soy nadie. Como el efecto en los ojos eran tan suave, más bien parece que he igualado el tono del párpado y ya, decidí que tenía que trazar un delineado fino con rabillo que le diera un toque diferente y me hiciera sentir cómoda. Os dije que este producto me gusta muchísimo y me estoy planteando repetir con él, en cambio el de acabado satinado se me estropeó bastante rápido porque parecía que se “aguaba”, este mate de momento sigue funcionando bien aunque ya lleva bastante tiempo abierto.