
La textura tiene cierta consistencia en ambas, es similar, y aunque parece algo espesa no cuesta de extender y no es necesaria mucha cantidad para notar la piel confortable. Ambas tienen fragancia, más llamativa la de la classic (rosa), ya sabéis que para mi gusto el perfume añadido siempre sobra y más en productos hipoalergénicos como estos. La sensación no es pegajosa si somos comedidos con ella, ambas me han dado el mismo buen resultado, suelo utilizarlas como crema de noche porque es bastante concentrada. Me han gustando muchísimo más que la de rápida absorción de Neutrógena.
Sobre el formato, son en tubo de 40 gramos y ambas tienen una fecha de caducidad de 15 meses, tiempo más que suficiente para que se terminen. Vienen precintadas, por lo que nos aseguramos de la higiene del producto y metidas en una caja, rosa o blanca dependiendo de la versión de la crema. Como son de plástico no muy duro será fácil cortarlas cuando tenga que apurar el final.
La crema de manos plus contiene proteínas de trigo, soja, uva, aceite de wira y filtros que ayudan a protegerse del sol, aunque no veo por ningún lado el spf se agradece ese punto. En las manos es habitual que con los años aparezcan manchas y nunca está demás que una hidratante nos proporcione ese extra.
La crema de manos classic es mucho más completa puesto que se puede utilizar para dar un extra en la piel seca o los puntos concretos que la necesiten pero también para hacer frente a irritaciones como las que sufrimos tras la depilación o el afeitado.
He usado de forma habitual la plus y puntualmente la classic, si he notado que el grado de hidratación que proporciona es distinto aunque igualmente duradero. También la he probado en las piernas tras la depilación, las deja suaves, no molesta. Por lo que he visto rondan los 5-7 €.