
Los rouge edition velvet de Bourjois tienen formato líquido, tiñen el labio, se aplican con esponjita y son modulables, me gusta dar varias capas para que el color sea más intenso. Hay que tener los labios en buen estado y es mejor utilizarlos de manera continua. Los tengo desde los primeros meses del año y ahora empiezo a notar que se han puesto más secos, pero me siguen sacando del paso e incluso para utilizar como base con otros labiales. Lo más negativo que encuentro es el olor, muy sintético. Destaco en tono 07 nude-ist como discreto y el 08 grand cru por ese efecto de labio de terciopelo rojo.
Ya que el año pasado incluí los labiales de la gama shine edition pensé que no iba a volver a destacarlos aunque hay nuevos tonos que me han conquistado. La toma de contacto con los rouge edition 12 horas de Bourjois es destacable, nada más hay un tono (el rosado) con el que no estaba cómoda del todo, pero los otros tienen unan duración muy buena, cobertura y no resecan el labio. El tono 30 prune afterwork es socorrido, sin llegar a ser nude tiene un punto rosa que lo hace perfecto para el día a día, y el tono 34 cherry mi cherie es un rojo bonito (¿qué sería de nosotras sin un buen labial rojo?) que hace la pareja perfecta con uno de los perfiladores de labios de la marca.
La relacción con el corrector cc eye cream de Bourjois fue un tanto curiosa, es ligero, la cobertura no es alta pero no reseca y tiene spf 15. Me acostumbré tanto a utilizarlo que una vez se me ha terminado es como si me faltara algo, así que aunque de entrada me gustó fue la sensación que me dejó al tener que prescindir de él saber que me había gustado tanto. No descarto reponerlo cuando lo encuentre en promoción.
Sigo con la marca, las máscaras de pestañas me parecen una buena opción, al menos en las mías que son largas y curvadas, creo que con todas ellas voy consiguiendo ese efecto de “pestañacas” que tanto me gusta. De entrada la fórmula puede ser algo ligera pero no tarda en espesar, los cepillos tienen a ser grandes y, aunque hay otras destaco la 1 seconde, twist up the volume y volume glamour efecto push up.
Los compactos oil free de Sephora me llevan acompañando ya unos cuantos años, recurro a ellos una y otra vez. Tenía ganas de probar un formato que descatalogaron así que al recibir los compactos silk edition de Bourjois dejé un poco de lado los de Sephora para poner estos a prueba. Quiero haceros una reseña detallada de porqué me han gustado, digamos que se dan bastante la mano a lo que consigo con los de Sephora pero que el polvo de los de Bourjois es más fino (y huelen más rico).
El fijador de cejas de Catrice, o eyebrow filler, no es nada nuevo, siendo la pareja perfecta con el lápiz de la misma marca es casi un básico en los maquillajes que os voy mostrando. Me resulta cómodo y tiene buen precio, desbancó al gel transparente de Kiko y tengo repuesto en casa, aunque confieso que me gustaría probar el de Maybelline cada vez leo más impresiones negativas sobre el efecto “mojado” que deja y me desanimo.
No destacaré sombras de ojos porque es algo con lo que varío mucho, pero si con los lápices contour clubbing de Bourjois, lanzaron nuevos tonos que me dejaron casi con la boca abierta por la cremosidad y la duración. Cremosos porque se aplican fácilmente pero hay que trabajarlos rápido porque una vez se secan quedan fijos, tanto para delinear como para utilizar a modo de base para aplicar ciertas sombras. Aunque como son resistentes al agua no van bien en la línea del agua, lógica pura y dura. Quizá destacaría el ultra black como básico a la hora de realizar un delineado difuminado, el 59 dynamint que fue un verde agua (turquesa) al que saqué mucho partido durante los meses de calor para dar un toque divertido haciendo contraste, y dos marrones de distinta gama, 57 up and brown y 60 taupe of the top.
La esponja de maquillaje de Real tecniques me lleva acompañando meses, ya se va notando que está vieja pero sigue cumpliendo su función. Se que hay personas a las que les ha salido malísima, la mía nada más tenía algunas manchas de base que no conseguía sacar pero conseguí limpiarla con aceite y vuelve a tener un tono uniforme. Ahora mismo también tengo la beauty blender, así que cuando os hable de ella compararé ambas. Por el momento me quedo con esta porque es más económica.
Durante el 2014 mis uñas han sufrido un antes y un después. Empecé a ser consciente de que tenía que cumplir ciertos consejos para tener las uñas bonitas y tras meses de constancia con bálsamos hidratantes, cremas de manos y otras cosas se que no sería lo mismo sin el bálsamo de cutículas para Badger (una composición muy buena, natural, textura aceite, buena hidratación y olor) y el top coat weekly de Vinylux que ayuda a que la manicura se selle y aguante más tiempo perfecta.